Según Segob, la violencia intrafamiliar aumentó 120% desde la emergencia del Covid-19
Por: Nivia González-Pastor
La violencia doméstica es el abuso físico, sexual y psicológico entre personas que conviven o mantienen una relación sentimental, por lo general ejercida por un hombre contra su pareja sexual.
La ONU Mujeres ha declarado en varias ocasiones que los esfuerzos para hacer frente a la actual crisis de salud pueden conducir a un aumento de la violencia doméstica contra las mujeres. Durante esta pandemia, 9 de cada 10 personas que son violentadas en el hogar son mujeres y 1 de cada 4 es testigo; 66% sufre violencia física y 22% psicoemocional. Varios reportes indican que en México se registran 2,500 llamadas diarias en busca de ayuda ante una situación de violencia.
Te interesa: El Coronavirus y su impacto social y económico
Como han informado algunos informes de policías y líneas telefónicas alrededor del mundo, los países que han recurrido al confinamiento como medida de precaución ante la pandemia, han detectado el aumento de la violencia. Las mujeres, al estar obligadas a permanecer en sus hogares bajo el mismo techo que sus violentadores, se vuelven más vulnerables y sí, esto incluye los feminicidios.
En China y en Francia el aumento de la violencia fue de 30%. En Canadá, España, Alemania y Reino Unido hubo un incremento del 10% a 30%
¿Por qué aumenta?
Durante la cuarentena, la violencia aumenta debido al estrés que se vive por la situación de salud, la economía, el trabajo y el solo hecho de sentirse encerrado. Muchas personas no saben cómo controlar sus emociones o sentimientos frente a contextos diferentes como un encierro obligado y recurren a violentar a quienes están a su alrededor.
También es importante considerar que la violencia aumenta porque hay menos policías, el acceso a la justicia es limitado, los albergues o lugares para proteger a las mujeres de la violencia están en su mayoría cerrados y, desgraciadamente, nuestra cultura, al ser todavía machista, obliga a las mujeres a “obedecer” o a sostener relaciones sexuales con su pareja aunque ella no quiera.
En varios estados de la República Mexicana se han compartido los teléfonos de emergencia para reportar cualquier situación de violencia. Sin embargo, en palabras de Juan Martín Pérez García, director de la Red por los Derechos de la Infancia en México, los servicios no sólo tardan en dar una pronta respuesta, sino que para abrir una carpeta de investigación por violencia doméstica o de género se requiere acudir a hacer el trámite de manera presencial, a pesar de las herramientas virtuales que hay.
Las mujeres se vuelven víctimas sin poder recurrir a nadie. La mayoría de las veces dependen económicamente de su agresor, lo que todavía dificulta más que puedan levantar una denuncia contra éste. En las clínicas y hospitales se han dejado de atender muchos casos de lesiones por violencia, pues se le da máxima prioridad al Covid. Esto, sin duda, deja aun más vulnerable a las mujeres, pues las pocas que podrían acudir a los hospitales y recibir ayuda, son ignoradas.
Pero no solo hay violencia física…
Durante la cuarentena, las mujeres que tienen hijos y además trabajan, también tienen el triple de actividades. Las tareas de la casa se suman a las responsabilidades de madre y a las escolares al tener que ayudar a sus hijos. ONU-Mujeres en México destaca que las mujeres ocupan aproximadamente 2.6 veces más tiempo que los hombres a las tareas de cuidar a niños y niñas, enfermos, adultos mayores y cuidado del hogar en general.
Es muy importante recalcar que en casa las actividades deben ser de ambos, tanto hombres como mujeres y no debe “cargarse la mano” a un sexo en específico.
A dónde acudir
En Nuevo Laredo se brindará atención a las mujeres en la línea fija 713-52-81 y los nuevos números 867-251-84-11 y 867- 273-24-98. En casos de emergencia, donde la vida de la mujer o su familia está en riesgo, se podrá solicitar apoyo de la Unidad Especializada Para La Atención de la Violencia Intrafamiliar y Violencia de Género (UNEVIG) 075 o 911.