Mansa Musa fue el gobernante más rico de Mali y su mayor impacto económico en África fue por la peregrinación que realizó a La Meca. Es considerado para los historiadores el hombre más rico que haya existido.
Su peregrinación a La Meca
Mansa Musa realizó una peregrinación a La Meca, a la edad de 44 años. Esta peregrinación duró más de un año, convirtiendo el acontecimiento en una leyenda que llegó a conocerse hasta Europa por el impacto que económico que hubo. Parte de este viaje fue lograr que se conociera el islam en África Occidental y que el emperador estableciera relaciones con otras dinastías. Con esto, la riqueza que forjó Mansa Musa fue por el oro, la sal y la venta de esclavos que se llevaban al norte y se cambiaban por productos textiles.
El impacto del emperador no fue sólo por el hecho de realizar una hajj (peregrinación), si no por el séquito de personas que lo acompañaron, se calcula que fueron entre 20,000 y 60,000, entre ellos esclavos. Los esclavos también iban vestidos en seda fina quienes lo acompañaron hacia La Meca. Otro dato registrado, es que llevaba 80 camellos, en el que cada uno portaba 85 kilos de oro para cubrir los gastos de su viaje.
Propinas de oro
La visita de Mansa Musa, llegó a desestabilizar la capital, El Cairo, por los grandes gastos que hacía y las cantidades de propinas en oro que daba a su paso. Otra de las crónicas que existen del por qué las incalculables cantidades de oro que poseía, es que por cada pepita de oro extraída, tenían que dar una de igual gramaje al emperador.
La época dorada de Mali
El imperio de Mansa Musa duró 25 años, entre 1307 y 1332 pero se le conoció como la época dorada de Mali por el gran efecto económico que dejó en África occidental y las siguientes expediciones de Europa aun después de su muerte en 1337.
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