Por: Lights Magazine
La Organización Mundial de la Salud (OMS) es una agencia especializada creada por la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Fue fundada el 7 de abril de 1948, y su sede se encuentra en Ginebra, Suiza. Esta organización es la encargada de las políticas de prevención, promoción e intervención de la salud a nivel mundial.
Con seis oficinas regionales repartidas en el mundo, cada una de ellas cuenta con un Director Regional que maneja y supervisa al personal sanitario y a otros expertos.
Las actividades que ocupan a la OMS son llevar a cabo la clasificación de enfermedades y mantener al día la lista de medicamentos básicos que cada país debería tener disponible a precios accesibles para su población. También se encarga de tomar medidas sanitarias con el fin de detectar y detener epidemias y en el caso de que se realicen viajes internacionales promueve la vacunación.
De igual forma, asiste a los Países Menos Avanzados (PMA) apoyando con vacunas contra enfermedades infecciosas, brindando suministro de agua potable, protección materna y erradicación de enfermedades. También cuenta con un Programa de Lucha contra el SIDA que tiene como objetivo el acceso fácil al tratamiento, investigación y vigilancia epidemiológica. Además garantiza el acceso a medicamentos de buena calidad mediante el programa de pre-evaluación de medicamentos.
Todo suena magnífico, pero las enfermedades como el VIH/SIDA, la malaria y la tuberculosis siguen afectando la salud mundial.
Entonces, ¿cuál es hoy por hoy la prioridad para la OMS?
El 24 de mayo del 2017 se aprobó un presupuesto de US $4,421,5 millones para 2018-2019, de los cuales 59% se invertirá en combatir enfermedades no contagiosas como la hipertensión y la salud psiquiátrica, dejando una tercera parte de este presupuesto en la sede de Ginebra, donde los salarios son altos, libres de impuestos y el nivel de vida es suntuoso. El 41% restante se utilizará para atender las enfermedades contagiosas como el SIDA, el paludismo o la tuberculosis – nuevamente una cuarta parte de ese 41% se quedará en Suiza. ¿Qué tal?
¿Pero por qué la OMS se enfoca más en las enfermedades que afectan a los países ricos?
La razón es porque Qatar, Luxemburgo, Singapur, Brunei y Kuwait contribuyen con más de la mitad de las donaciones, por lo tanto, la OMS responde a las necesidades políticas de sus patrocinadores dejando en segundo lugar a la población altamente vulnerable de los países pobres. Así, promueve iniciativas para una nutrición sana, mientras millones de niñas y niños de los países en vías de desarrollo no tienen qué comer.
En este mundo globalizado, no sólo por el internet, sino también por las enfermedades que traspasan fronteras, la OMS debería preocuparse por aquellos padecimientos que amenazan y afectan la salud mundial, enfocándose en los males que afligen a los más desprotegidos, pero tal parece que la salud y la esperanza de vida estriba con base en la riqueza personal.
1 Fuente: Centro de Prensa de la OMS, 2017
