¿Podemos experimentar la paz cuando vivimos con preocupaciones y ansiedad?
Por: Ing. Gabriel Rojas, especialista en Teología Cristiana y miembro de Iglesia Cristiana Shalom en Nuevo Laredo, Asambleas de Dios
Ansiedad…
La definición básica de ansiedad dice que es un aspecto normal del estado emocional de los seres humanos. Este estado emocional está ampliamente relacionado con el sentido de supervivencia, tal como lo son el miedo, la ira, la tristeza y la felicidad. Es posible que una gran mayoría de la gente experimente un trastorno de ansiedad el cual se considera como un estado en el que se encuentra inquieto el ánimo de una persona, es un sentimiento que genera miedo, desasosiego y preocupación.
¿Cuántos de nosotros hemos estado preocupados o ansiosos? Todos los días hay razones y algunas se pueden considerar aparentes, cito algunas desde complejas hasta las sencillas:
- Pensamientos de muerte
- La recuperación incierta de alguna enfermedad prolongada
- La pérdida del empleo
- El fallo del juez que no se define
- La compra de algún recurso indispensable y su entrega incierta
- El problema que no se resuelve a nuestro favor.
Las estadísticas actuales sobre la ansiedad se estima que un billón de adultos en todo el mundo padece ansiedad, fuente: Organización Mundial de la Salud 2022.
¿Qué dice la Biblia?
Siempre tiene buenas noticias. El evangelio según San Mateo registra una enseñanza de Jesús a sus discípulos, desde el problema más sencillo, Jesús nos invita a que confiemos en Él. Durante su ministerio público, Jesús les enseñó a aprender a poner como prioridad, el buscar la voluntad de Dios. Esto es buscar su reino y su justicia.
La vida y el cuerpo
¿Acaso no es la vida más que la comida, y el cuerpo más que la ropa? -Mateo 6:25
Jesús considera ejemplos básicos para desarrollar nuestra confianza en Él:
- Les invita a reflexionar en como los pajarillos no plantan ni cosechan, ni guardan en graneros y retóricamente pregunta ¿No son ustedes para Dios mucho más valiosos que los pájaros? Jesús nos invita con humildad que tengamos confianza en Dios.
- Continuando con la reflexión les dice: miren los lirios del campo, no trabajan, no cosen su ropa, sin embargo, ni Salomón (un rey sabio y rico en la historia de Israel 950 años antes de Cristo) con toda su gloria se vistió tan hermoso como ellos. Si Dios cuida de manera tan maravillosa las flores silvestres que hoy están y mañana se echan al fuego, ¿no hará mucho más a ustedes hombres de poca fe?
La invitación sabia
Jesús enfatiza, tengan por seguro que Dios cuidará de ustedes. No se afanen, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos? Nuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas. –Mateo 6:25-34
Jesús concluye su enseñanza invitando a todos aquellos que desean abandonar la ansiedad y la preocupación: Buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.
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Palabras sabias en la Biblia para abandonar la ansiedad y la preocupación
- El Salmista que confía en Dios: Si Dios no edificare la casa, en vano trabajan los que la edifican. Salmo 127: 1
Creemos que solos lograremos mucho, pero la experiencia que describe el salmista es contundente. Invitemos a Dios a nuestras vidas para que vengan tiempos de refrigerio, de paz, y de alegría.
- El Proverbista Salomón menciona: La angustia en el corazón del hombre le abate, más la palabra buena lo alegra. Proverbios 12:25. Leer y confiar en la palabra de Dios reanima el corazón.
- El Apóstol Pedro nos exhorta: Lleva toda tu ansiedad sobre Jesús, porque Él tiene cuidado de nosotros. – 1ª Pedro 5:7 Identifica en tu corazón que te pone en estado de ansiedad y entrégalo en las manos de Dios y Él te dará de su paz.
- El Salmista David nos comparte su experiencia: Claman los justos y Dios los escucha y los libra de todas sus angustias. Salmo 34:17 Presenta tus necesidades de todo corazón a Dios y ciertamente Él te escuchará.
Confiemos en Dios, su paz supera todo entendimiento
Por nada estéis afanosos, sino que sean conocidas sus peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús. – Filipenses 6:6,7
Contestando la pregunta del tema de hoy, la respuesta es categóricamente, ¡SÍ! Sí se puede tener paz en Cristo. Dios nos la ofrece en medio de las adversidades de la vida sin caer en los trastornos de la ansiedad, de esta manera la calidad de nuestra vida en Cristo será de regocijo y no de preocupación, de gozo y no de temor sobre un futuro incierto.
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